Camino Lebaniego y Gronze

Mochila:
He confieso que soy un poco desorganizado a la hora de empacar en la mochila, pero se recomienda que no exceda el 10 por ciento del peso del peregrino. En mi mochila llevé: 2 pantalones, 1 pijama, 2 camisetas técnicas manga larga y corta, 1 forro polar, 1 softshell, 1 capa de agua, tres pares de calcetines con 75% de coolmax, botas o zapatos de trekking nunca nuevos, saco de dormir (necesario en la mayoría de albergues), braga o pañuelo, guantes finos, gorra, palos de trekking, botella de agua de plástico.

Neceser y botiquín según necesidades.

Albergues:
San Vicente de La Barquera Albergue El Galeón teléfono: 942715349, Cades: Albergue Municipal teléfono: 678080789 y Albergue de Cabañes: teléfono 626813080. En todos los albergues no se puede reservar, pero se puede llamar para verificar la ocupación en días anteriores. No tuvimos problemas para pernoctar.

Nota:

Historia
En la comarca de Liébana se celebra el jubileo desde el siglo VI, en 1512 el papa Julio II concedió el privilegio de celebrar un periodo jubilar o indulgencia plenaria para los visitantes o peregrinos del monasterio de Santo Toribio de Liébana. Este privilegio se concedió debido a la conservación de las dependencias del monasterio del Lignum crucis, el trozo más grande de la cruz en la que murió Cristo. El Año Jubilar se celebra cuando la festividad de Santo Toribio cae en domingo, representando uno de los santuarios de mayor relevancia en la cristiandad. Los peregrinos que van a venerar la reliquia de la Cruz de Santo Toribio son conocidos como cruceros o crucenos.

El conjunto de edificaciones del monasterio data de diferentes épocas, destacándose la iglesia actual construida en el siglo VIII y XIII, y una capilla barroca del siglo XVIII donde se custodia el Lignum Crucis. En la fachada de la iglesia se encuentra la puerta del perdón, de estilo románico, que se abre al comienzo de cada año jubilar.

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Ver: Indice IBP de la ruta: MUY DURA: 242 HKG

El recorrido se realizó el 18 de noviembre de 2013, abarcando una distancia de 21,5 km en un tiempo total de 8 horas y 46 minutos. La salida ocurrió a las 8:37 AM, llegando a destino a las 5:23 PM. En movimiento, se invirtieron 6 horas y 9 minutos, con 2 horas y 37 minutos detenidos. La velocidad máxima alcanzada fue de 13,7 km/h, mientras que la media en movimiento fue de 3,5 km/h y la media total de 2,5 km/h. El trayecto finalizó en el punto de partida, con un nivel de dificultad técnica moderado.
Subimos 439 metros, alcanzando una altitud máxima de 99 metros y descendiendo la misma cantidad. El GPS estuvo activo durante la ruta y contamos con fuentes de agua en el camino. La ruta no estaba señalizada, partiendo desde N 43º22.547´-W 004º23.829´.
Lugares visitados: Ría de San Vicente de la Barquera, Parque Miramar, Parque de José Antonio, Torre del Preboste, Palacio del Corro del Siglo XVI, Ruinas del Hospital de la Concepción del Siglo XIV-XVI, Iglesia de Santa María de los Angeles de los Siglos XIII y XVI, Mirador y Murallas Medievales, Castillo del Rey de los Siglos XIII-XIV, Puente de la Barquera, Ría de Brazo Mayor, Fuente de estilo románico, Santuario de la Barquera del Siglo XV, Ruinas del Fuerte de Santa Cruz de Suaz (Rompeolas), Punta del Castillo, Ermita de Santa Catalina (ruinas), Ensenada de Liñera, Playa de Liñera, Punta Liñera, Bajo de la Regatona, Punta Cueto Marías, Punta del Fraile, Playa de Fuentes, Ensenada de Fuentes, Punta de África, Ensenada de Berrellin, Sonríos, Playa de Barnejo-Berrellín, Pumarin, Río Gandarillas, Parque Natural de Oyambre, Camino de los Eucaliptos, Ruinas del Convento de San Luis del Siglo XV (ruinas), y Puente de La Maza del Siglo XVI.
San Vicente de la Barquera, en Cantabria (España), es un municipio costero con una gran belleza natural y patrimonial que atrae al turismo. El 80% de su territorio pertenece al Parque Natural de Oyambre y cuenta con una protección especial por su valor paisajístico y ecológico.
La caminata comenzó en el aparcamiento entre el Parque Miramar y la Ría de San Vicente, recorriendo diversos puntos de interés histórico y natural, con un regreso al punto de partida después de haber disfrutado de las vistas y la riqueza cultural del entorno.

El recorrido se realizó el 18 de noviembre de 2013, abarcando una distancia de 21,5 km en un tiempo total de 8 horas y 46 minutos. La salida ocurrió a las 8:37 AM, llegando a destino a las 5:23 PM. En movimiento, se invirtieron 6 horas y 9 minutos, con 2 horas y 37 minutos detenidos. La velocidad máxima alcanzada fue de 13,7 km/h, mientras que la media en movimiento fue de 3,5 km/h y la media total de 2,5 km/h. El trayecto finalizó en el punto de partida, con un nivel de dificultad técnica moderado.
Subimos 439 metros, alcanzando una altitud máxima de 99 metros y descendiendo la misma cantidad. El GPS estuvo activo durante la ruta y contamos con fuentes de agua en el camino. La ruta no estaba señalizada, partiendo desde N 43º22.547´-W 004º23.829´.
Lugares visitados: Ría de San Vicente de la Barquera, Parque Miramar, Parque de José Antonio, Torre del Preboste, Palacio del Corro del Siglo XVI, Ruinas del Hospital de la Concepción del Siglo XIV-XVI, Iglesia de Santa María de los Angeles de los Siglos XIII y XVI, Mirador y Murallas Medievales, Castillo del Rey de los Siglos XIII-XIV, Puente de la Barquera, Ría de Brazo Mayor, Fuente de estilo románico, Santuario de la Barquera del Siglo XV, Ruinas del Fuerte de Santa Cruz de Suaz (Rompeolas), Punta del Castillo, Ermita de Santa Catalina (ruinas), Ensenada de Liñera, Playa de Liñera, Punta Liñera, Bajo de la Regatona, Punta Cueto Marías, Punta del Fraile, Playa de Fuentes, Ensenada de Fuentes, Punta de África, Ensenada de Berrellin, Sonríos, Playa de Barnejo-Berrellín, Pumarin, Río Gandarillas, Parque Natural de Oyambre, Camino de los Eucaliptos, Ruinas del Convento de San Luis del Siglo XV (ruinas), y Puente de La Maza del Siglo XVI.
San Vicente de la Barquera, en Cantabria (España), es un municipio costero con una gran belleza natural y patrimonial que atrae al turismo. El 80% de su territorio pertenece al Parque Natural de Oyambre y cuenta con una protección especial por su valor paisajístico y ecológico.
La caminata comenzó en el aparcamiento entre el Parque Miramar y la Ría de San Vicente, recorriendo diversos puntos de interés histórico y natural, con un regreso al punto de partida después de haber disfrutado de las vistas y la riqueza cultural del entorno.

En la época medieval, surgió una corriente de peregrinación hacia Santo Toribio de Liébana para venerar el «Lignum Crucis» y los restos del Santo, a los que se les atribuían propiedades sanadoras y milagrosas. Por esta razón, a estos peregrinos se les empezó a conocer como «crucenos» o «cruceros». Desde 1512, gracias a una bula papal, se estableció el Año Jubilar Lebaniego (el año en que el día de Santo, el 16 de abril, cae en domingo), convirtiendo este Camino en una importante ruta de peregrinación.

Además, muchos peregrinos que se dirigían a Santiago, ya sea desde el Camino del Norte o desde el Camino Francés, se desviaban hacia Santo Toribio a través del Camino Lebaniego y el Vadiniense, conectados a través de los Picos de Europa.

El Camino Lebaniego transcurre entre San Vicente de la Barquera y Santo Toribio de Liébana, pasando por localidades como Cades, Cicera, Cabañes y Potes. Muchos peregrinos dividen la ruta en tres etapas de cierta dificultad, pero nosotros decidimos hacerlo en seis para disfrutar de los paisajes y pueblos de Cantabria.

Realizamos un recorrido Lebaniego de 71,4 km con un desnivel acumulado de 2396 m, siendo las etapas 3 y 4 las más exigentes. Durante nuestras rutas, ofrecemos mapas y planos aéreos girados para facilitar la comprensión de las rutas. Utilizamos tres colores en los planos: celeste para el Camino del Norte, rojo para la etapa del día y verde para nuestro Camino Lebaniego completo.

Esperamos que esta información resulte útil para peregrinos y senderistas que se aventuren en este Camino. Saludos de palocorto1 y ¡Buen Camino!

En la pintoresca villa costera de San Vicente de la Barquera, es posible disfrutar de un apacible paseo por la parte occidental de los acantilados del Monte Boria. Durante esta caminata tranquila y relajante, la soledad y la contemplación del mar ofrecen una experiencia sensorial inolvidable, especialmente en la primera mitad del recorrido.

El punto de partida de la ruta es la Plaza Mayor de San Vicente de la Barquera. Desde allí, se recorre el pueblo y se cruza la ría por el Puente Nuevo, para luego seguir hacia la derecha hasta llegar al Santuario de la Barquera.

Poco después, se puede llegar al Faro del Bajo de la Planca caminando por el rompeolas, y después regresar por el mismo camino para encontrar el sendero que marca el comienzo de la «Ruta de los Acantilados». Este sendero, que asciende suavemente entre las casas, llevará a los excursionistas hasta el Faro de la Silla, que actualmente funciona como centro de interpretación del Parque Natural de Oyambre.

A partir de este punto, se sigue el camino señalizado que conduce a las ruinas de la Ermita de Santa Catalina. Más adelante, se desvía a la derecha después de pasar la Posada Punta Liñera, por una pista que lleva al hospedaje.

Al salir de este punto, se gira a la derecha por un camino marcado por dos vallas, que conduce hasta el borde mismo del acantilado, donde hay una señalización mediante postes de madera.

Una vez en el acantilado, el sendero serpentea por la Sierra de Boria, pasando por la Cueva del Culebre, el Bajo de la Regatona, unas cruces en memoria de marineros fallecidos en el mar, la Punta del Cueto Maria y finalmente llegando a la Playa de Fuentes.

El regreso a San Vicente de la Barquera se realiza por una pista asfaltada que atraviesa el Barrio de Santillán, hasta alcanzar la carretera N-634, para luego seguir hasta la gasolinera y finalmente por la acera hasta llegar de vuelta a San Vicente de la Barquera, dando por concluida la ruta.

Vivirlo es fundamental.

Para los seguidores de la fe católica, los cinco lugares sagrados son: Roma, Jerusalén, Santiago de Compostela, Caravaca de la Cruz y Santo Toribio de Liébana, donde se venera una parte significativa del Lignum Crucis, conocida como la «madera de la cruz», en la que se dice que fue crucificado Jesucristo. El Papa Julio II otorgó el privilegio de celebrar el jubileo el 23 de septiembre de 1512 mediante la emisión de una Bula. Con esta indulgencia plenaria, los visitantes y peregrinos podían redimir sus pecados. El Año Jubilar Lebaniego se celebra cada año en el que el 16 de abril, festividad de Santo Toribio, coincide con un domingo. Las festividades duran desde el 16 de abril de un año hasta el 15 de abril del siguiente.

Comenzamos nuestra jornada desde la Iglesia de Santa María de los Ángeles, en la Puebla Vieja de San Vicente de la Barquera. Desde allí podemos disfrutar de unas vistas impresionantes sobre la Marisma de Pombo. El sellado de la Credencial lo realizamos en el Nómada Hostel, antiguo Hospital de la Concepción del siglo XIV-XV. En el recorrido, nos encontramos con indicaciones del Camino Lebaniego y del Camino del Norte hacia Santiago de Compostela, compartiendo trazado hasta Muñorrodero.

En Serdio, un lugar destacado para los peregrinos es la Taberna La Gloria, que ofrece menú y servicios de sellado de credencial. Continuamos nuestro trayecto, separándonos del Camino del Norte y adentrándonos en un camino de tierra bien mantenido. Cruzamos Muñorrodero, donde podemos abastecernos de agua y comida en el único bar del pueblo. Desde su terraza, podemos observar a otros peregrinos que siguen el Camino Jacobeo del Norte.

La Senda Fluvial del Nansa nos brinda un recorrido agradable junto al río, con la opción de visitar la cueva de Reju-Viento con permiso previo. La senda nos lleva hasta la cascada del río Supino, cerca de la Central Eléctrica de Trascudia. Continuamos nuestro camino sobre el Puente del Tortorio, con su característica arquitectónica de «lomo de asno». Llegamos a Cades, finalizando esta etapa que, a pesar de tener mucho asfalto, ha sido llevadera.

La climatología en el Camino Lebaniego es variable, por lo que es importante estar preparado para cualquier cambio. La credencial del peregrino se puede obtener en Santander y en el Monasterio de Santo Toribio de Liébana.

Es importante tener en cuenta que el albergue en Cades ya no está disponible, por lo que es recomendable consultar con el Albergue de el Cárabo para alojamiento. La Casona del Nansa ha cerrado sus puertas recientemente.

Destacar la compañía de Magdalena en este recorrido inolvidable.

Fuentes consultadas:
– Texto 1
– Texto 2
– Texto 3
– Texto 4
– Texto 5
– Texto 6
– Texto 7
– Texto 8

Una opción sencilla y adecuada para una mañana soleada.
Es agradable comenzar desde San Vicente, disfrutando de la belleza de su casco antiguo, su puente la Maza, su zona de pescadores y las vistas a las montañas o al mar.
La ruta está marcada desde el puerto hasta la Ermita de la Virgen de la Barquera, luego hacia los viveros y el rompeolas, los faros de San Vicente y de Silla, y el Centro de Interpretación de Oyambre. Siguiendo el recorrido se encuentran las ruinas de la Ermita de Santa Catalina. Después de bordear el mar, se llega a la impresionante vista de la ensenada de Fuentes y la playa del mismo nombre. ¡Espectacular!
El regreso, esta vez más corto, se realiza parcialmente por asfalto. Puedes optar por regresar por el mismo camino si lo prefieres.
Un agradable paseo para disfrutar.

…a disfrutar.

AVISO: La ruta descrita, así como el track y los waypoints, los he descargado de mi GPS después de realizarla personalmente. Sin embargo, debes considerarlos como meramente orientativos. Los tracks no siempre indican el itinerario exacto, ya que pueden contener errores debido a posibles problemas de recepción de satélites durante la grabación. Es responsabilidad de cada uno tomar las medidas de seguridad apropiadas según la dificultad, que dependerán de las condiciones climáticas, así como de la preparación técnica y física del excursionista.
Siempre es recomendable ir acompañado al monte, informar a un conocido o familiar sobre nuestro recorrido y tiempos estimados, llevar el teléfono con suficiente carga, agua, comida y abrigo adecuado según la época y ruta a realizar.

Ruta de los Acantilados de San Vicente de la Barquera

Datos técnicos:

Situación: San Vicente de la Barquera (Cantabria).

Acceso: Salida desde la Plaza Mayor de San Vicente de la Barquera.

Tipo de Recorrido: Circular

Distancia: 13 km.

Dificultad: Fácil, aunque con algunos repechos.
Valoración IBP al final de la descripción.

Tiempo en movimiento: 4h10m.

Tiempo Total: 5h.

Tipo de firme: Camino, senda, pista y algo de pista asfaltada.

Desnivel acumulado de subida: 310 m.

Agua: Llevar agua.

Época recomendada: Cualquiera.

Señalización: Está bien señalizado todo el recorrido.

Importante

Mejor ver la ruta en el ordenador. En el móvil se pierde información y enlaces.

Pequeña descripción de la ruta:

Realizada el 18 de Agosto. Aprovechando unos días de descanso en San Vicente de la Barquera, decidimos hacer La ruta de los Acantilados.
La ruta clásica la he alargado un poco saliendo desde la Plaza Mayor de San Vicente de la Barquera.
Y en sentido contrario para disfrutar de la parte más bonita de la mitad del recorrido hasta el final en el casco viejo.
El recorrido por la zona alta de los acantilados en la Playa de Fuentes y la Playa de Berrelín, muy recomendable.
El Centro de Interpretación del Parque Natural de Oyambre merece también una visita.
Aprovechar una mañana para recorrer esta parte de la costa próxima a la bonita población de San Vicente de la Barquera.

Valoración de la ruta según IBP INDEX:

Dependiendo de tu preparación física, busca el valor 42 y tendrás tu nivel de dificultad.

Travesía de tres días por el Camino Lebaniego, del 29 al 31 de diciembre de 2017:

Categoría: Moderado por la distancia y desnivel a superar, sin dificultad técnica.

La ruta está bien señalizada con marcas, postes y el característico poste de hormigón del camino Lebaniego. Discurre principalmente por sendas, pistas y una parte de carretera. Encontraremos pocas fuentes, por lo que es importante cargar en cada una que encontremos, así como aprovechar los pueblos para recargar energías.

Es necesario reservar en los albergues, ya que son pequeños y algunos pueden estar cerrados. A lo largo del recorrido encontraremos varios albergues, permitiéndonos planear el camino adaptándolo a nuestras necesidades.

En general, los albergues están en buen estado, excepto el albergue público de Cabañes, el cual se encontraba en mal estado en las fechas en que realizamos la travesía.

Ruta:

Etapa 1: Desde San Vicente de la Barquera hasta Cades, con un recorrido variado por pueblos y bosques.

Etapa 2: De Cades a Lebeña, pasando por collados y bosques de hayas.

Etapa 3: Desde Lebeña hasta el Monasterio de Santo Toribio de Liébana, finalizando el camino.

Grupo organizador: ADN Astur.

Síguenos en Facebook en ADN Astur para más información y contenido relacionado con nuestras travesías.

Descripción del Camino Lebaniego en tres etapas, llevado a cabo en Septiembre de 2017, coincidiendo con el Año Jubilar Lebaniego 2017.

Desde hace siglos, numerosos peregrinos jacobeos han desviado su trayecto en el Camino de la Costa para internarse en la región lebaniega hasta llegar al Monasterio de Santo Toribio y venerar la reliquia del Lignum Crucis. Hemos seguido las huellas de estos devotos caminantes para llegar al Valle de Liébana en el corazón de los Picos de Europa.

Etapas:
– San Vicente de la Barquera-Cades, 18,6 kms.
– Cades-Lebeña-N 621, 25,7 kms.
– N-621-Mº Santo Toribio de Liébana, 17 kms.

El Camino Lebaniego se extiende desde Santander hasta Santo Toribio, atravesando una zona montañosa de gran belleza con un rico patrimonio natural y cultural, que se puede recorrer en tres jornadas. La señalización desde San Vicente de la Barquera hasta Santo Toribio combina flechas granates y mojones con el símbolo del Lignum Crucis.

Partiremos desde San Vicente de la Barquera, punto donde empieza verdaderamente el Camino Lebaniego.

Fue Santo Toribio de Astorga, custodio de las reliquias de Jesucristo en Jerusalén, quien trasladó un fragmento de la Cruz a Astorga, ciudad donde fue Obispo. Esta reliquia fue llevada a Liébana por cristianos para protegerla de la invasión musulmana. Este hecho fue crucial para que el Monasterio de Santo Toribio y Liébana se transformaran en un importante lugar de peregrinación.

Las peregrinaciones lebaniegas no se consolidaron hasta el Renacimiento, cuando el papa Julio II estableció el Año Jubilar Lebaniego, privilegio que fue confirmado al año siguiente por su sucesor, León X, equiparando Liébana con Santiago.

A Liébana acudían cristianos de todas partes, creando sin saberlo una red de caminos que conectaba diversos santuarios. Así, muchos peregrinos que se dirigían a Santiago por el Camino de la Costa se desviaban hacia Liébana.

ETAPA 1
San Vicente de la Barquera-Cades (18,6 km)

La parte antigua de San Vicente de la Barquera, conocida como la Puebla Alta, alberga numerosos edificios construidos para acoger a los peregrinos que se dirigían a Santiago por el Camino de la Costa.

Nosotros partimos de la Iglesia Santa María de los Ángeles, de estilo gótico. Aquí, el peregrino que busca llegar a Santo Toribio aún debe recorrer parte del Camino del Norte antes de tomar rumbo hacia Liébana.

Cuando realizamos la ruta en 2017, existían dos caminos para llegar a Cades.

El Camino Lebaniego, al salir de San Vicente de la Barquera, continúa por la Acebosa, pasando entre el Cueto y el monte de San Martín hasta Hortigal, siguiendo el Camino del Norte. El Camino se bifurcaba en Hortigal, dirigiéndose hacia Bielba por el Alto de la Reboy, camino de Bielba.

El otro camino, más largo y actualmente utilizado, se desvía en Hortigal siguiendo el Camino del Norte hasta Muñorrodero, donde toma la Senda Fluvial del Nansa para dirigirse al interior, hasta Cades.

Nosotros optamos por desviarnos en Hortigal hacia Gandarilla y Bielva, para coincidir con el camino actual en Puente del Arrudo y llegar juntos a Cades.

En Cades, es recomendable visitar una ferrería del siglo XVIII que capturaba agua a 1.000 metros de altura para abastecer una ferrería y dos molinos harineros. Cades, al igual que otras localidades de este municipio, conserva construcciones populares típicas de la Montaña. Nos alojamos en el Albergue de Cades.

ETAPA 2
Cades-Lebeña-N 621 (25,7 km)

El Camino parte de Cades por la carretera CA-856 que asciende por el Nansa y luego se adentra en la hoz del Lamasón. El paisaje es impresionante, lo que hace más llevadero el largo tramo por asfalto hasta Sobrelapeña. A unos dos kilómetros en la ruta se encuentra Lafuente, un pequeño pueblo que destaca por la surgencia de agua en su interior.

Desde Lafuente tomamos el camino que pasa a Liébana por el collado de Hoz. Por una pista se llega a Burió, un pequeño pueblo antes del collado de Hoz, que ofrece una vista excepcional de los Picos de Europa. Después de pasar el puerto, abandonamos la carretera por una pista que desciende a Cicera, un bello pueblo entre montañas.

Para continuar hacia Lebeña, hay dos opciones: por el collado de Arceón, siguiendo una pista de grava con fuertes pendientes, o por la canal del Franco hasta el collado Berés. Ambos caminos se unen en el nacimiento del arroyo de Maderes y continúan hasta Lebeña, donde se encuentra la iglesia mozárabe de Santa María de Lebeña, una de las obras más hermosas del prerrománico español.

Tras visitar la iglesia, seguimos la ruta incorporándonos a la carretera que baja de Lebeña hasta el río Deva, junto a la N-621. Pasamos la noche en la Casa Rural El Agero.

ETAPA 3
Lebeña-N 621-Monasterio Santo Toribio de Liébana (17 km)

Tras cruzar la N-621, ascendemos hasta Allende por carretera. En Allende, continuamos por el camino que sube por la ladera izquierda de la canal y está señalizado con flechas granates hasta Cabañes. El tramo hasta Pendes es rápido y sencillo, pero la bajada hasta la ermita de San Francisco de Trasvega, entre Castro Cillórigo y Tama, es bastante empinada. Desde la ermita hasta Potes, el camino discurre por el sendero PR S-4 que sigue el valle con el río Deva a nuestra izquierda.

En Tama se encuentra un Centro de Visitantes del Parque Nacional de los Picos de Europa, aunque para visitarlo hay que retroceder un poco. Para llegar a Potes, podemos evitar la carretera tomando el camino de Campañana, que termina en el corazón de la villa de Potes.

A tres kilómetros de Potes se encuentra el monasterio de Santo Toribio, nombrado en honor al obispo que llegó a Liébana en el siglo VI. Según la leyenda, el obispo medió en una pelea entre un buey y un oso, lo que llevó a los lugareños a convertirse al cristianismo y contribuir a la construcción del templo.

El monasterio alberga el Lignum Crucis, el fragmento de la cruz de Jesucristo, y concede el Jubileo al peregrino que llegue al monasterio el año en que la festividad de San Toribio es domingo.