Ruta a través de los paisajes de la campiña cordobesa, explorando Espejo y parte de su territorio, donde se encuentra un interesante recorrido a lo largo de diferentes momentos históricos que han marcado esta localidad.

Aparco al final de un pequeño polígono industrial cerca de la N-432, justo antes de llegar al antiguo Cuartel de la Guardia Civil. Desde aquí, después de pasar junto a este edificio, me dirijo a la calle de San Roque, donde comienza la Ruta de Robert Capa.

Robert Capa era el seudónimo utilizado por un par de corresponsales gráficos de guerra y fotoperiodistas -Endre Ern? Friedmann, húngaro, y Gerda Taro, alemana- para aumentar el valor de sus fotografías. Ambos vinieron a documentar la Guerra Civil Española en 1936 y capturaron la icónica imagen «Muerte de un miliciano» en Espejo. Esta fotografía, considerada una de las mejores del siglo XX, fue tomada en un camino público cerca de la Haza del Reloj, donde actualmente se encuentra una escultura que representa este momento.

Después de la trágica muerte de Gerda Taro durante la batalla de Brunete, Friedmann continuó utilizando el nombre de Robert Capa en sus trabajos fotográficos en conflictos como la Segunda Guerra Mundial y la Guerra de Indochina.

Desde este lugar, atravieso el olivar hasta llegar a la N-432 y continuo por un camino que lleva a la Fuensanta, donde se encuentra una fuente abrevadero con propiedades curativas. Luego sigo por el Camino Mozárabe hasta llegar al antiguo Aljibe, una construcción hidráulica romana muy importante en la zona.

Continúo mi recorrido pasando por la Torre de la Pontanilla, una fortificación ibérica que jugó un papel relevante en antiguas guerras. Luego subo hacia el pueblo y visito el Castillo Ducal, una construcción del siglo XIII que se ha convertido en un lugar habitable en la actualidad.

Más adelante, paso por la Iglesia de San Bartolomé, la ermita de Santa Rita y el Pozo Mármol, antes de llegar a la capilla de San Miguel, una iglesia barroca del siglo XVIII. Finalmente, termino mi ruta en las Calleras, una plaza histórica que ha sido el centro neurálgico de Espejo desde el siglo XVIII.

Larga travesía la de hoy rumbo a Córdoba, en un trayecto que en condiciones normales, a pesar de la distancia, no presentaría grandes dificultades. Sin embargo, la lluvia de la noche anterior complicó un poco la situación, encontrándonos con largos tramos de caminos embarrados y bajadas resbaladizas que nos obligaron a usar nuestros bastones para mantenernos en pie. Afortunadamente, tras completar el primer tercio del recorrido, llegamos a Santa Cruz, un lugar perfecto para tomarnos un descanso prolongado.

Iniciamos la ruta dejando atrás el encantador albergue de Espejo y nos dirigimos hacia la plaza de la Constitución, donde se encuentra la comisaría de la policía local. Allí, nos sellaron la credencial con un bonito sello rojo. Mientras caminábamos por la calle Ramón y Cajal, pasando por la Casa de la Cadena, un vecino nos contó la historia y la importancia de Espejo, antigua Ucubi romana donde el emperador Marco Aurelio tenía sus raíces familiares.

Continuamos por la Calle Amaro y luego por la Calle de la Cuesta de la Harina, saliendo del pueblo para tomar una pista asfaltada que nos llevó hasta el Puente de la Pontanilla de origen romano. A lo lejos, divisamos Santa Cruz, destacando un gran silo blanco. Siguiendo por la Vereda de Espejo, descendimos hasta un cruce señalizado donde cambiamos de dirección y luego nos dirigimos hacia la pista a la izquierda.

Después de pasar por el Cortijo del Alcaparro, llegamos a la carretera N-432 y siguiendo hacia la derecha, cruzamos el puente sobre el Río Guadajoz. La señalización nos desvió por un sendero entre olivares que nos llevó finalmente a Santa Cruz, donde encontramos el Hostal Casa Jose para tomar un almuerzo y obtener otro sello en la credencial.

En esta localidad, conocida por la cría de galgos, descubrimos la afición de los habitantes por estos animales, que han sido campeones de España en diversas competiciones. Además, Santa Cruz se caracteriza por tener limoneros en lugar de naranjos, cuyos limones son aptos para el consumo.

A partir de aquí, nos quedan más de 26 kilómetros sin poblaciones ni servicios hasta llegar a Córdoba. Salimos de Santa Cruz por el Camino del Jaco y pasamos por un hito metálico del Camino Mozárabe que nos indica que estamos a 1024 km de Santiago de Compostela. Dejamos atrás un curioso ancla y nos adentramos en la Vereda de Granada o Cordel de la Campiña, donde se une la variante directa que viene desde Castro del Río.

El camino se vuelve más complicado a medida que avanzamos hacia Córdoba, especialmente debido a la lluvia que hizo que camináramos más lentamente por el barro. Superamos algunos repechos y bajadas con la ayuda de nuestros bastones, hasta llegar al Cortijo de Torre Juan Gil Alto, donde un cartel nos indica que faltan 13,2 km para llegar a Córdoba.

Continuamos cruzando el Arroyo del Cañetejo de Torres de Juan Gil y encontramos un refugio donde pudimos resguardarnos de la lluvia y ponernos nuevamente la capa impermeable. Desde aquí, divisamos la ciudad de Córdoba en la lejanía, aunque la lluvia complicaba la visibilidad.

Avanzando por una pista, llegamos a la carretera CO-3204 en las afueras de Córdoba y finalmente ingresamos a la ciudad a través del barrio de Fray Albino. Cruzamos el puente romano sobre el Guadalquivir y pasamos por la emblemática Torre de la Calahorra y la Puerta del Puente, llegando frente a la Mezquita-Catedral.

Recorrimos la Calle del Corregidor Luis de la Cerda hasta adentrarnos en la Judería, donde se encuentra nuestro alojamiento, el Hostel Al-Katre. Córdoba es una ciudad que merece al menos un día de visita para explorar sus múltiples atracciones, entre las que destacan la Mezquita, la Judería, el Alcázar de los Reyes Cristianos y la ciudad califal de Medina Azahara.

Larga travesía la de hoy rumbo a Córdoba, en un trayecto que en condiciones normales, a pesar de la distancia, no presentaría grandes dificultades. Sin embargo, la lluvia de la noche anterior complicó un poco la situación, encontrándonos con largos tramos de caminos embarrados y bajadas resbaladizas que nos obligaron a usar nuestros bastones para mantenernos en pie. Afortunadamente, tras completar el primer tercio del recorrido, llegamos a Santa Cruz, un lugar perfecto para tomarnos un descanso prolongado.

Iniciamos la ruta dejando atrás el encantador albergue de Espejo y nos dirigimos hacia la plaza de la Constitución, donde se encuentra la comisaría de la policía local. Allí, nos sellaron la credencial con un bonito sello rojo. Mientras caminábamos por la calle Ramón y Cajal, pasando por la Casa de la Cadena, un vecino nos contó la historia y la importancia de Espejo, antigua Ucubi romana donde el emperador Marco Aurelio tenía sus raíces familiares.

Continuamos por la Calle Amaro y luego por la Calle de la Cuesta de la Harina, saliendo del pueblo para tomar una pista asfaltada que nos llevó hasta el Puente de la Pontanilla de origen romano. A lo lejos, divisamos Santa Cruz, destacando un gran silo blanco. Siguiendo por la Vereda de Espejo, descendimos hasta un cruce señalizado donde cambiamos de dirección y luego nos dirigimos hacia la pista a la izquierda.

Después de pasar por el Cortijo del Alcaparro, llegamos a la carretera N-432 y siguiendo hacia la derecha, cruzamos el puente sobre el Río Guadajoz. La señalización nos desvió por un sendero entre olivares que nos llevó finalmente a Santa Cruz, donde encontramos el Hostal Casa Jose para tomar un almuerzo y obtener otro sello en la credencial.

En esta localidad, conocida por la cría de galgos, descubrimos la afición de los habitantes por estos animales, que han sido campeones de España en diversas competiciones. Además, Santa Cruz se caracteriza por tener limoneros en lugar de naranjos, cuyos limones son aptos para el consumo.

A partir de aquí, nos quedan más de 26 kilómetros sin poblaciones ni servicios hasta llegar a Córdoba. Salimos de Santa Cruz por el Camino del Jaco y pasamos por un hito metálico del Camino Mozárabe que nos indica que estamos a 1024 km de Santiago de Compostela. Dejamos atrás un curioso ancla y nos adentramos en la Vereda de Granada o Cordel de la Campiña, donde se une la variante directa que viene desde Castro del Río.

El camino se vuelve más complicado a medida que avanzamos hacia Córdoba, especialmente debido a la lluvia que hizo que camináramos más lentamente por el barro. Superamos algunos repechos y bajadas con la ayuda de nuestros bastones, hasta llegar al Cortijo de Torre Juan Gil Alto, donde un cartel nos indica que faltan 13,2 km para llegar a Córdoba.

Continuamos cruzando el Arroyo del Cañetejo de Torres de Juan Gil y encontramos un refugio donde pudimos resguardarnos de la lluvia y ponernos nuevamente la capa impermeable. Desde aquí, divisamos la ciudad de Córdoba en la lejanía, aunque la lluvia complicaba la visibilidad.

Avanzando por una pista, llegamos a la carretera CO-3204 en las afueras de Córdoba y finalmente ingresamos a la ciudad a través del barrio de Fray Albino. Cruzamos el puente romano sobre el Guadalquivir y pasamos por la emblemática Torre de la Calahorra y la Puerta del Puente, llegando frente a la Mezquita-Catedral.

Recorrimos la Calle del Corregidor Luis de la Cerda hasta adentrarnos en la Judería, donde se encuentra nuestro alojamiento, el Hostel Al-Katre. Córdoba es una ciudad que merece al menos un día de visita para explorar sus múltiples atracciones, entre las que destacan la Mezquita, la Judería, el Alcázar de los Reyes Cristianos y la ciudad califal de Medina Azahara.

Explora la arquitectura romana de Espejo a través de un emocionante senderismo guiado. La actividad está organizada por «A TAJO HECHO» y la «Asociación en defensa del patrimonio histórico de Espejo «ANNIUS VERUS»» de Espejo y se llevará a cabo el día 06/03/16.
Para obtener más detalles, te recomendamos ponerte en contacto con cualquiera de estas dos asociaciones.

Si estás buscando información sobre vías ferratas, en rocjumper.com puedes encontrar una lista completa de todas las vías ferratas disponibles. Descubre las opciones que tienes para disfrutar de esta emocionante actividad y elige la que mejor se adapte a tus gustos y habilidades.

Las vías ferratas son una excelente manera de experimentar la escalada de una forma segura y emocionante. A través de esta lista, podrás conocer las ubicaciones, dificultades y características de cada una de las vías ferratas disponibles.

No te pierdas la oportunidad de explorar nuevas rutas y desafiar tus habilidades en la escalada. Visita la lista de vías ferratas en rocjumper.com y comienza a planificar tu próxima aventura.

Buen recorrido por los alrededores de Espejo, visitando su casco antiguo, el castillo y la fortaleza Ducal, así como los rincones típicos de la zona y la escultura que conmemora la Foto de Robert Capa, El Miliciano.

Hoy no ha sido el día más adecuado para ir, ya que la lluvia ha dejado algunos tramos del camino llenos de barro, especialmente en los olivares, lo que dificultaba el sendero.

Al despertar en Espejo, decidimos tomar una ducha relajante en el acogedor albergue municipal donde pasamos la noche. Después, emprendimos nuestra marcha sin poder detenernos a tomar café, ya que no había ningún bar en nuestro camino. Como buenos peregrinos, seguimos adelante sin mirar atrás. Un amable lugareño nos indicó el camino hacia Santa Cruz, comenzando con una bajada empinada. Algunos kilómetros más adelante, la pista se suavizó y se volvió monótona. Si decides seguir este trazado, debes prestar atención, ya que la pista que va hacia el oeste te llevará directamente a la N-432. Sin embargo, a 1,5 km antes de llegar, debes desviarte hacia la derecha en un ángulo de 90 grados en dirección norte, marcado por un waypoint. Luego, el camino te llevará de vuelta al río Guadajoz, seguido de un breve tramo por la N-432. Después de cruzar el puente, las indicaciones te llevarán hacia la derecha, adentrándote en el pueblo. Para finalizar nuestra ruta del día, nos dirigimos a la iglesia de la Asunción, donde disfrutamos de unas deliciosas codornices en Casa Jose.

Se recomienda tener precaución al cruzar el rio Guadajoz, ya que puede resultar imposible dependiendo de la época del año.
Es importante tener en cuenta que el rio Guadajoz suele estar muy fangoso y puede dañar los vados, por lo que no se aconseja utilizar esta ruta.
Si necesitas una alternativa, te sugerimos consultar la ruta disponible en wikiloc con el siguiente código: 908856.

Sendero muy agradable a través del campo de Espeja, donde se pueden observar una gran variedad de aves y hermosos paisajes

Ruta que va de Espejo hasta Santa Cruz y que incluye:

– Visita a la Capilla de San Miguel del siglo XVIII, a solo 0.8 km de distancia.

– Recorrido por el Castillo Ducal de Espejo, ubicado a 1.1 km de la Capilla.