El Cerro de la Calderico es una formación rocosa ubicada en el municipio de Consuegra en la provincia de Toledo, en la región de Castilla-La Mancha. Esta prominencia destaca por albergar y preservar actualmente 12 de los 13 molinos de viento que fueron construidos entre los siglos XVI y XIX, junto con el Castillo de la Muela o Castillo de Consuegra de origen musulmán.

Estos molinos son considerados patrimonio cultural, ya que fueron mencionados e inspiraron la obra «Don Quijote de la Mancha» de Miguel de Cervantes. Comenzamos nuestro recorrido desde El Bolero, que ha sido convertido en la oficina de turismo municipal, y continuaremos explorando los molinos y el Castillo de Consuegra, hasta llegar a la Senda de Gregorio Prieto, que es una ruta poco conocida pero de gran importancia regional debido a la relación del pintor con los molinos de la zona.

Una serie de escaleras nos llevarán al molino El Rucio, donde se pueden adquirir artesanías y productos locales, y desde allí podremos disfrutar de unas vistas panorámicas impresionantes. Siguiendo nuestro camino, visitaremos los últimos dos molinos antes de regresar por el mismo camino hasta nuestro punto de partida. Aunque la carretera también permite el acceso en vehículo, se perdería la oportunidad de visitar algunos molinos más alejados.

Los Molinos de viento son imágenes icónicas de Castilla-La Mancha, verdaderos protagonistas y bonitos monumentos de la región. En Consuegra, provincia de Toledo, se encuentra una de las zonas turísticas que no puedes dejar de visitar. Ubicados en un lugar donde convergieron diversas culturas como romanos, godos y árabes, los Molinos de viento y el Castillo de la Muela son lugares de gran valor artístico y cultural.

Construidos a finales del siglo XVIII y principios del XIX, los trece molinos originales se han conservado en su mayoría, manteniendo algunos la maquinaria original para moler el trigo y transformarlo en harina. Declarados Bien de Interés Cultural en 2008, forman uno de los conjuntos molineros más grandes y mejor conservados de España, ubicados en el cerro Calderico. Cada uno lleva nombres curiosos, evocando la temática manchega o capítulos del Quijote.

En cuanto al Castillo de la Muela, de origen musulmán en el siglo X, fue reconstruido por la orden de San Juan de Jerusalén, mostrando una impresionante arquitectura militar. Con un núcleo central y cuatro torres semicirculares, alberga en su interior un sistema de abastecimiento de agua, la prisión prioral, la capilla, la sala de archivos y la sala capitular. En este lugar falleció el hijo del Cid Campeador y perteneció a particulares hasta 1962, cuando pasó a ser propiedad del Ayuntamiento.

Los doce molinos son Clavileño, Espartero, Rucio, Caballero del Verde Gabán, Chispas, Alcancía, Cardeño, Vista Alegre, Sancho, Mochilas, Mambrino y Bolero. El itinerario está marcado y hay varios aparcamientos para acercarse al Castillo o a los Molinos. El recorrido termina en el punto de inicio, aunque el track continúe un tramo.

En la zona familiar también se puede realizar una ruta hacia las antenas de la Emisora TV en la Sierra de las Tres Fuentes de Puerto Lápice por la Casa de la Solana, así como un paseo por Villarta de San Juan.

¡Espero que disfrutes de esta experiencia ruteando por la región de Castilla-La Mancha!

Recuerda siempre respetar la naturaleza, no alterar nada de lo que encuentres y no dejar huella de tu paso. Las rutas mencionadas son solo orientativas y la responsabilidad de llevarlas a cabo recae en cada individuo, considerando las medidas de seguridad necesarias según las condiciones del entorno y la preparación física y técnica de cada uno.

Es importante tener en cuenta que la dificultad de las rutas está dirigida a montañeros habituados a caminar en diferentes terrenos, por lo que si tienes poca experiencia, es recomendable añadir un grado más de dificultad al itinerario. ¡Disfruta del viaje y respeta el entorno natural!

Los Molinos de viento son imágenes icónicas de Castilla-La Mancha, verdaderos protagonistas y bonitos monumentos de la región. En Consuegra, provincia de Toledo, se encuentra una de las zonas turísticas que no puedes dejar de visitar. Ubicados en un lugar donde convergieron diversas culturas como romanos, godos y árabes, los Molinos de viento y el Castillo de la Muela son lugares de gran valor artístico y cultural.

Construidos a finales del siglo XVIII y principios del XIX, los trece molinos originales se han conservado en su mayoría, manteniendo algunos la maquinaria original para moler el trigo y transformarlo en harina. Declarados Bien de Interés Cultural en 2008, forman uno de los conjuntos molineros más grandes y mejor conservados de España, ubicados en el cerro Calderico. Cada uno lleva nombres curiosos, evocando la temática manchega o capítulos del Quijote.

En cuanto al Castillo de la Muela, de origen musulmán en el siglo X, fue reconstruido por la orden de San Juan de Jerusalén, mostrando una impresionante arquitectura militar. Con un núcleo central y cuatro torres semicirculares, alberga en su interior un sistema de abastecimiento de agua, la prisión prioral, la capilla, la sala de archivos y la sala capitular. En este lugar falleció el hijo del Cid Campeador y perteneció a particulares hasta 1962, cuando pasó a ser propiedad del Ayuntamiento.

Los doce molinos son Clavileño, Espartero, Rucio, Caballero del Verde Gabán, Chispas, Alcancía, Cardeño, Vista Alegre, Sancho, Mochilas, Mambrino y Bolero. El itinerario está marcado y hay varios aparcamientos para acercarse al Castillo o a los Molinos. El recorrido termina en el punto de inicio, aunque el track continúe un tramo.

En la zona familiar también se puede realizar una ruta hacia las antenas de la Emisora TV en la Sierra de las Tres Fuentes de Puerto Lápice por la Casa de la Solana, así como un paseo por Villarta de San Juan.

¡Espero que disfrutes de esta experiencia ruteando por la región de Castilla-La Mancha!

Recuerda siempre respetar la naturaleza, no alterar nada de lo que encuentres y no dejar huella de tu paso. Las rutas mencionadas son solo orientativas y la responsabilidad de llevarlas a cabo recae en cada individuo, considerando las medidas de seguridad necesarias según las condiciones del entorno y la preparación física y técnica de cada uno.

Es importante tener en cuenta que la dificultad de las rutas está dirigida a montañeros habituados a caminar en diferentes terrenos, por lo que si tienes poca experiencia, es recomendable añadir un grado más de dificultad al itinerario. ¡Disfruta del viaje y respeta el entorno natural!

Un recorrido encantador por la senda de los Molinos y el Castillo de Consuegra.
En realidad el trayecto fue de 7,400 kilómetros

Ruta circular partiendo de Consuegra con paradas en:
– Fortaleza de la Muela (5.8 km)
– Monte Calderico (6.5 km)

En esta ocasión, comencé mi recorrido en las afueras de un hermoso pueblo de la provincia de Toledo llamado Consuegra. Este lugar destaca por su belleza, especialmente por el Cerro Calderico que lo embellece aún más. Empecé mi ruta por la carretera que conduce a los Molinos y al Castillo en una fría mañana, disfrutando de unas vistas espectaculares entre los Molinos y el Castillo de La Muela. Uno tras otro, los molinos se iban sucediendo ante mis ojos en un entorno de 360 grados hasta llegar al vértice geodésico de La Cuesta, que se encuentra a 829 metros sobre el nivel del mar.

La ruta está impregnada de historia y bellos paisajes, rememorando las Tierras de Don Alonso Quijano, quien está representado en más de un lugar a lo largo de este recorrido corto pero intenso y hermoso. No podía faltar en esta aventura el fiel amigo Sancho, cuya presencia se hace sentir a lo largo de todo el camino. Hay una carretera que te lleva hasta el último molino, muy cerca del vértice geodésico, con estacionamientos disponibles incluso para autobuses y personas minusválidas. Se trata de una ruta corta, hermosa e intensa, muy recomendable para todos los amantes de la historia y la naturaleza.

A tan solo 10 minutos de la salida 121 A-4, este bonito pueblo y su Castillo junto a sus Molinos se convierten en una parada obligatoria para todos aquellos que viajan al Sur o a Madrid. Dedica una hora u hora y media de tu tiempo a perderse por las calles de este encantador lugar y descubre la magia que encierran sus rincones.

Descubriendo Consuegra:

Aparcamos en el primero de los 12 molinos que hay en Consuegra, el Molino Bolero, donde hay zona para aparcar. Visitar los dos primeros molinos marca el comienzo de nuestra ruta, seguida por la subida por el camino que nos lleva a tres molinos más y nos regala impresionantes vistas. Continuamos hacia la muralla, atravesando un agujero que nos lleva al imponente castillo. Exploramos sus diversas estancias con mobiliario y disfrutamos de más impresionantes vistas antes de rodearlo y dirigirnos a los otros molinos en el cerro Calderico. El último en nuestra lista es el Molino Clavileño, donde nos deleitamos con una escultura metálica de Don Quijote de la Mancha.

Los 12 molinos de Consuegra:

Los molinos, construidos en la primera mitad del siglo XIX en el cerro Calderico, son: 1. Bolero, 2. Mambrino, 3. Sancho, 4. Mochilas, 5. Vista Alegre, 6. Cardeño, 7. Alcancía, 8. Chispas, 9. Caballero del Verde Gabán, 10. Rucio, 11. Espartero, y 12. Clavileño. Recorrer todos ellos merece la pena, ya que ofrecen bonitas vistas y están en buen estado de conservación.

El Castillo de la Muela:

También conocido como el Castillo de la Muela, se encuentra en el centro del cerro Calderico. Es una fortificación con una historia que abarca desde épocas romanas hasta cristianas. La entrada tiene un costo de 7 euros, pero vale la pena para explorar sus estancias y disfrutar de las vistas. Cada civilización que lo habitó dejó su marca en la fortificación, adaptándola a sus necesidades y posibilidades.

El Cerro Calderico, ubicado en Consuegra, es un lugar emblemático que alberga el Castillo y 12 Molinos de viento del siglo XIX.

Consuegra es un municipio perteneciente a la provincia de Toledo, en la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha.

Este municipio se encuentra en la falda de un cerro en la comarca de La Mancha, limitando con varios municipios vecinos.

Entre los montes que lo rodean se encuentran Valdespino, Dehesa Nueva, Sierra Luenga, la Mata, la Serna, Serrezuelas, la Gineta y la Alberquilla.

El río Amarguillo, a pesar de secarse en verano, fue responsable de una inundación en 1891 y desemboca como afluente del río Guadiana.

El Cerro Calderico es una elevación caliza de unos 100 metros de altura, situada cerca del pueblo de Consuegra.

En su cima se encuentran el Castillo y los Molinos de Viento, que son elementos patrimoniales importantes del lugar.

Este cerro ha sido habitado desde la antigüedad, sirviendo como hogar a diversas culturas a lo largo de la historia.

Desde la construcción del castillo en la Edad Media hasta la explotación turística actual, el Cerro Calderico ha sido un lugar de gran importancia en la región.

INFORMACIÓN. El itinerario es perfectamente viable para todas las edades, ideal para disfrutar en compañía de la familia.
Desde la carretera A-4, se pueden contemplar majestuosamente los molinos blancos de Consuegra. De regreso de nuestro viaje a Toledo, decidimos hacer una parada para visitarlos, aunque el tiempo nos permitió explorar únicamente los 7 molinos del sur y los alrededores del castillo.
Los molinos de Consuegra, situados en el Cerro Calderico, conforman un conjunto de 12 molinos harineros distribuidos en dos conjuntos, 7 en el sur, 5 en el norte y el castillo en el centro.
FUNCIONAMIENTO DE LOS MOLINOS. Las cuatro aspas están cubiertas con lonas para captar la energía del viento, la cual se transmite al eje de madera apoyado en dos piedras como rodamientos de fricción. En el interior, sobre el eje se encuentra la rueda Catalina, un engranaje de 40 dientes que se conecta con otro engranaje, la linterna, haciendo girar la piedra volandera sobre la solera para moler el grano.
Pocos conocen que las caperuzas de los molinos no van fijas al cilindro de la torre, sino que se mueven alrededor de un anillo para ajustar la posición de las aspas según la dirección del viento. Las pértigas exteriores tienen la importante función de dirigir el movimiento de la cubierta y las aspas.
Las 12 ventanillas cercanas a la cubierta también son clave, permiten al molinero conocer la dirección del viento y ajustar la posición de las aspas.
EL CASTILLO. El Castillo de la Muela en Consuegra tiene una historia que se remonta a los tiempos visigodos, siendo propiedad del conde Don Julián. Reconstruido posiblemente por Almanzor en el siglo X, fue cedido a Alfonso VI por Al-Mu’tamid en 1097 como parte de un acuerdo matrimonial. Tras la batalla de Consuegra contra los Almorávides, en la cual murió el hijo del Cid Campeador, el castillo fue finalmente recuperado por los cristianos en el siglo XII.

Desde el punto más alto del terreno hasta el último artefacto que contiene datos, se pueden explorar las máquinas desde su interior.