Maravilloso recorrido matutino por los rincones del casco antiguo de Altea, la playa del Espigón y el Río Algar.

El casco antiguo de Altea es hermoso y bien conservado, pasear por sus calles empedradas, con casas blancas adornadas con macetas de flores, disfrutando de sus miradores y de las obras de arte en sus paredes, donde se puede apreciar la influencia bohemia de los años sesenta y setenta que dejaron su huella en los artistas que todavía residen allí.

La desembocadura del río Algar es un humedal litoral de gran valor ecológico, destacando su patrimonio histórico y su importancia como zona de avistamiento de aves durante sus migraciones anuales, con más de 100 especies diferentes que se pueden observar.

Se recomienda realizar este paseo temprano en la mañana, para disfrutar de la tranquilidad y el silencio del pueblo aún dormido, antes de que la afluencia turística cambie el ambiente.

Si prefieres una ruta más corta por el casco antiguo, puedes seguir este recorrido: Casco Antiguo de Altea y Playa de la Roda.

Altea ha sido siempre un lugar que ha atraído a artistas de diversas disciplinas, convirtiéndose en un punto de encuentro para el mundo bohemio. Personalidades como Eberhard Schlotter, Marisol, Rafael Alberti y Vicente Blasco Ibáñez han sucumbido a los encantos de Altea.

Altea es un importante centro cultural en el levante español, con el reconocimiento de Capital Cultural de la Comunidad Valenciana y la presencia de instituciones como el Palau de Altea, la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Miguel Hernández de Alicante y el Museo Étnico de Música.

Si deseas unirte a alguna de mis rutas o organizar una excursión privada, puedes contactarme a través del correo electrónico camiamando@gmail.com o a través de la página de Facebook.

Es importante tener en cuenta que la información proporcionada en mis rutas es basada en experiencias personales y opiniones, y no debe considerarse como única guía para realizar las actividades descritas. Las condiciones climáticas, vallas u otras circunstancias pueden cambiar con el tiempo, por lo que es recomendable contar con las condiciones físicas adecuadas, conocimientos técnicos y equipo apropiado para las actividades de aventura.

El autor no se hace responsable de las consecuencias derivadas del uso inadecuado de la información proporcionada.

¡Gracias y buen camino!

Partiendo desde la costa, esta ruta nos lleva a través de las zonas de Cap Blanch, El Planet y Els Arcs. En estas áreas podremos explorar las ruinas de una antigua cenia, la ermita de Sant Antoni y Sant Jaume, y la recién construida de Sant Isidre. Además, podremos ver los restos de un acueducto romano, la primera gran obra hidráulica en Altea.

Se trata de un recorrido suave y sin complicaciones. La mayor parte del camino se realiza por caminos asfaltados y sería ideal para personas tranquilas, corredores y ciclistas.

Ruta elaborada y recomendada por la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Altea como «Ruta magenta», salvo algunos cambios personales, como el punto de partida, que está un poco alejado de la ruta original.

Partiendo desde la costa, esta ruta nos lleva a través de las zonas de Cap Blanch, El Planet y Els Arcs. En estas áreas podremos explorar las ruinas de una antigua cenia, la ermita de Sant Antoni y Sant Jaume, y la recién construida de Sant Isidre. Además, podremos ver los restos de un acueducto romano, la primera gran obra hidráulica en Altea.

Se trata de un recorrido suave y sin complicaciones. La mayor parte del camino se realiza por caminos asfaltados y sería ideal para personas tranquilas, corredores y ciclistas.

Ruta elaborada y recomendada por la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Altea como «Ruta magenta», salvo algunos cambios personales, como el punto de partida, que está un poco alejado de la ruta original.

Maravilloso recorrido matutino por los estrechos pasajes del casco antiguo de Altea y por la playa de la Roda.

El casco antiguo de Altea es realmente hermoso y se encuentra en perfecto estado de conservación. Pasear por sus calles empedradas, admirar sus encantadoras casas blancas adornadas con macetas de flores, visitar sus miradores y contemplar las obras de arte en sus paredes, todo ello impregnado con el aire bohemio que caracterizó a Altea la Vella en los años sesenta y setenta y que ha dejado su legado en los artistas que todavía residen allí, hacen de este lugar un sitio ideal para perderse explorando cada rincón de este mágico destino.

Iniciar el paseo temprano en la mañana permite disfrutarlo con la tranquilidad y el silencio del pueblo aún dormido, mientras la pequeña Y-NALA descansaba en las montañas… es altamente recomendable hacerlo a esta hora para experimentar la verdadera esencia del lugar, ya que al ser un destino turístico, cambia considerablemente más tarde.

Si deseas ampliar la ruta, incluyendo el río Algar, puedes seguir el siguiente recorrido:

«El topónimo de Altea proviene del griego Altahia que significa ‘yo curo’. Durante el periodo musulmán, Altea formaba parte de la taifa de Denia. Fue conquistada en 1244 por Jaime I de Aragón y repoblada con cristianos, recibiendo la carta puebla en 1279.»

«Altea siempre ha sido un imán para artistas de todo tipo: pintores, escritores, músicos, etc. En las décadas de los 60 y 70, se convirtió en el punto de encuentro de la bohemia Eberhard Schlotter, Marisol, Rafael Alberti, Vicente Blasco Ibáñez, son algunos de los personajes que no pudieron resistirse a los encantos de Altea.

Altea es uno de los epicentros culturales más importantes del Levante español, ostentando el título de Capital Cultural de la Comunidad Valenciana y albergando el Palau de Altea, la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Miguel Hernández de Alicante, el Conservatorio de Música, el Centro Cultural de Altea la Vella y el Museo Étnico de Música.»

Información obtenida de: https://es.vapf.com/entorno-costa-blanca-norte/altea/historia-altea.html#:~:text=El%20top%C3%B3nimo%20de%20Altea%20viene,la%20carta%20puebla%20en%201279.

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AVISO IMPORTANTE. Exención de Responsabilidad: La información compartida en Mis rutas de alltrails son datos, opiniones y vivencias personales del autor. Esta información nunca debe considerarse suficiente para realizar alguna de las rutas o actividades descritas.

Es importante tener en cuenta que, por motivos meteorológicos, vallas, paredes, etc., la ruta podría volverse inaccesible poco después de su publicación.

Para la práctica de deportes de aventura, senderismo, alpinismo, etc., se requieren condiciones físicas adecuadas, conocimientos técnicos y equipamiento específico, así como la familiarización con el entorno y las condiciones climáticas. Si no se poseen los conocimientos necesarios, es recomendable contratar los servicios de un profesional o realizar un curso de formación adecuado.

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Gracias y buen recorrido

Comenzamos este agradable paseo desde el mirador del paseo marítimo, ascendiendo suavemente por el sendero y la pista forestal en la margen sur del río Algar, para regresar por el antiguo Camí del Mandem. Durante el recorrido, tendremos la oportunidad de explorar la riqueza de este entorno natural, destacando la presencia de diversas especies de aves.

En nuestro trayecto nos encontraremos con el Molí dels Moros, el molino harinero más antiguo del municipio; el Pi del Senyoret, el segundo pino piñonero más grande de la Comunidad Valenciana, y también podremos admirar la belleza de la partida de L’Horta con su ermita de Sant Roc y sus acequias.

Bajo la imponente presencia de la Sierra de Bernia, atravesaremos extensos campos de cultivo frutícola principalmente cubiertos de nísperos.

Finalmente, daremos un tranquilo paseo por el casco antiguo de Altea, recorriendo sus encantadoras callejuelas que nos llevarán hasta la Parroquia de Nuestra Señora del Consuelo y el mirador en la Plaça de l’Esglesia.

Esta ruta, recomendada por la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Altea como «Ruta azul», es de baja dificultad y apta para cualquier tipo de usuario.

Partiendo del mirador del paseo marítimo, este recorrido atraviesa la impresionante Sierra de Bernia y conecta con Altea la Vella a través del Camí Fondo, regresando al río Algar por la histórica partida de Sogai.

Además de explorar el encantador y pintoresco casco antiguo de Altea la Vella, se pueden visitar la ermita de Santa Bárbara y disfrutar de espacios naturales como la Font del Garroferet y el río Algar.

En este agradable paseo, se puede observar la activa actividad agrícola de la huerta alteana, con olivares y cultivos de frutas como cítricos y nísperos principalmente.

Se trata de una ruta de baja dificultad apta para todos los usuarios.

Ruta recomendada por la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Altea como «Ruta roja».

Ruta Costera: El Sendero del Camino Real. Junto al mar.

Esta ruta, ahora conocida como Corredor Verde, sigue el antiguo Camino Real del Mar, bordeando la costa, en un trayecto de ida y vuelta.

A lo largo de este agradable paseo por sendas peatonales de tráfico tranquilo, podrás descubrir la peculiaridad del afloramiento volcánico de Cap Negret, admirar diversas mansiones señoriales y bunkers de la Guerra Civil, o disfrutar de un tranquilo paseo junto al mar en la playa de la Olla.

Se trata de una ruta de baja dificultad ideal para cualquier usuario, incluso para personas con movilidad reducida.

Ruta diseñada y recomendada por la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Altea como «Ruta verde«.

Desde el punto de partida en el mirador del Paseo del Mediterráneo, cerca de la playa, se inicia un paseo hacia la partida de L’Horta, donde resaltan la ermita de Sant Roc y el Pi del Senyoret. La ruta continua por la partida del Barranquet, donde emerge la pintoresca ermita de Sant Lluis Beltrán.

Seguimos por el Camí Vell d’Alcoi, un camino principal del siglo XVII que conecta directamente con el casco antiguo de Altea. A través de sus callejuelas pintorescas, llegarás a la Parroquia de Nuestra Señora del Consuelo y al mirador en la Plaça de l’Esglesia.

Es un recorrido tranquilo, elegante y sin dificultades. La mayor parte del camino es asfaltado y es ideal para caminantes tranquilos y **runners**. También es apto para ciclistas.

Ruta recomendada por la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Altea como la «Ruta **naranja**».

Desde el punto de observación en el Paseo del Mediterráneo, ubicado junto a la playa, comenzamos el recorrido hacia la partida de L’Horta donde sobresalen la ermita de Sant Roc y el Pi del Senyoret, para luego seguir por la partida del Barranquet que destaca por la pintoresca ermita de Sant Lluis Beltrán.

Continuaremos por el Camí Vell d’Alcoi, uno de los senderos principales del siglo XVII, que conecta directamente con el centro histórico de Altea llevándonos, a través de sus pintorescas calles, hasta la Parroquia de Nuestra Señora del Consuelo y al mirador ubicado en la Plaça de l’Esglesia.

Se trata de un recorrido apacible, distinguido y sin dificultades. La mayor parte de la ruta transcurre por caminos pavimentados y estaría especialmente recomendada para personas que caminan tranquilamente y corredores. También es apta para ciclistas.

Ruta diseñada y recomendada por la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Altea como «Ruta naranja«.

Me encuentro en la estación de tren de Altea, un pueblo costero encantador. En mi ruta de hoy, decido explorar la zona costera, empezando por el ayuntamiento y terminando en la playa de L’ Espigón, con hermosas vistas del Alt del Governador en la Sierra Gelada.

Camino hacia el Noreste, siguiendo la línea costera y recorriendo varias playas y calas de piedras. A la altura de la urbanización de Cap Negret, me encuentro con 2 bunkers de la Guerra Civil en la playa.

Continúo por caminos que bordean el mar, hasta llegar a la playa canina Mar y Montaña, donde los perros juegan felices. Más adelante, paso por la playa de la Solsida y me adentro hacia la urbanización Altea Hills, disfrutando de vistas a la sierra de Bernia, el Puig Campana y la Sierra Gelada.

Desciendo hasta llegar a la playa de La Barreta, en Pueblo Mascarat, dividido en dos partes por el puerto. Cruzo el puerto y llego a la playa Mascarat, para luego ascender a la parte alta de la población.

Continúo mi ruta hacia la urbanización Los Girasoles, al pie del Serra Toix, donde podría visitar el barranco y los puentes que llevan a la zona. Decido ir directo hacia el mirador Morro de Toix, disfrutando de impresionantes vistas de Calpe, el Peñón de Ifach y las sierras cercanas.

Llego al vértice del Serra Toix, con panorámicas hacia el Norte y Oeste, y las sierras Gelada, Puig Campana, Ponoig, Aitana y Bernia. Después, regreso por la urbanización Maryvilla, pasando por la playa Les Urques y ascendiendo hacia Canuta Baja en Calpe.

Finalmente, atravesando el municipio, llego a las playas de Calpe y culmino mi ruta en la parada de bus «Entrada Puerto», donde puedo coger el bus L1 que me lleva de regreso a la estación de tren de Calpe, con posibilidad de continuar hasta Denia o Alicante.