En las inmediaciones de Almadén, justo en el cruce entre el camino de Puerto Palacios y la Vereda de Badajoz, comienza nuestro recorrido. Optamos por tomar la vereda que ahora luce desierta, rodeada de muros, arbustos, alcornoques y quejigos. El breve trayecto hasta unirnos con el camino de Puertorregüelo resulta impresionante. Proseguimos por el nuevo camino, una pista en buen estado para vehículos, aunque para el caminante podría resultar monótona de no ser por el entorno que la rodea, inicialmente un bosque de eucaliptos y más adelante un arbolado dominado por pinos. Llegamos a Puertorregüelo y también al final de la pista. Es momento de descender por la otra cara de la sierra, a través de un complicado descenso entre pinos y vegetación, sorteando los abruptos obstáculos con precaución, disfrutando del paisaje, ya que la dehesa de Castilseras con su embalse al fondo se muestra ante el senderista. Una vez completado el descenso, el camino de Guajaroso nos conduce hasta las Casas del Vivero y el Aljibe, hoy en día deshabitadas, pero ideales como lugar de recreo. Ya en lo alto de Puerto Palacios, nos encontramos con dos opciones: ascender por el camino del Cascajal, una antigua vereda perdida entre la jara y en algunos tramos empedrada, o hacerlo por el cortafuegos. Optamos por la segunda alternativa, una dura subida cuya pendiente lo confirma, pero que logramos superar. Llegando a Puerto Palacios, las vistas son nuevamente impresionantes, vale la pena hacer una pausa para contemplarlas. El camino de regreso aguarda a nuestras espaldas.

Ruta que pretende explorar una parte de la sierra de Cordoneros, caracterizada por un bosque mayoritariamente de pinos, con presencia también de eucaliptos y bosque mediterráneo (encinas, quejigos y alcornoques), antes de adentrarnos en la zona adehesada de la finca Dehesa de Castilseras y bordear parte del embalse.

Para iniciar esta caminata, dejamos el vehículo en Puerto Palacios, una explanada en la cima de la sierra, cerca de Almadén, al cual se puede acceder sin problemas en un coche convencional. Comenzamos a caminar por un sendero entre los pinos, que eventualmente se pierde, aunque debido a que se trata de pinos de repoblación, se puede caminar sin dificultad por los terraplenes construidos a tal efecto. Pronto llegamos a una pista forestal que nos lleva a través del pinar de la sierra de Cordoneros.

Al llegar a un collado, nos dirigimos hacia la dehesa, sorteando una zona boscosa y un cortafuegos empinado hacia abajo. Una vez en la dehesa, continuamos hacia el embalse, ya sea campo a través o por senderos de ganado, en un terreno que no presenta mayores dificultades. Caminamos por la orilla del embalse, en su mayoría por un sendero bien marcado, aunque es necesario superar algunas zonas rocosas que no son muy complicadas. Llegamos a la presa, donde podemos disfrutar del paisaje y observar las instalaciones abandonadas

Después de recorrer el embalse, regresamos por una pista forestal hasta llegar a un cortafuegos que debemos ascender cuesta arriba. Una vez superado, llegamos al punto de partida. Se recomienda una visita a la ciudad de Almadén, que posee un importante patrimonio histórico y minero.

Ruta que pretende explorar una parte de la sierra de Cordoneros, caracterizada por un bosque mayoritariamente de pinos, con presencia también de eucaliptos y bosque mediterráneo (encinas, quejigos y alcornoques), antes de adentrarnos en la zona adehesada de la finca Dehesa de Castilseras y bordear parte del embalse.

Para iniciar esta caminata, dejamos el vehículo en Puerto Palacios, una explanada en la cima de la sierra, cerca de Almadén, al cual se puede acceder sin problemas en un coche convencional. Comenzamos a caminar por un sendero entre los pinos, que eventualmente se pierde, aunque debido a que se trata de pinos de repoblación, se puede caminar sin dificultad por los terraplenes construidos a tal efecto. Pronto llegamos a una pista forestal que nos lleva a través del pinar de la sierra de Cordoneros.

Al llegar a un collado, nos dirigimos hacia la dehesa, sorteando una zona boscosa y un cortafuegos empinado hacia abajo. Una vez en la dehesa, continuamos hacia el embalse, ya sea campo a través o por senderos de ganado, en un terreno que no presenta mayores dificultades. Caminamos por la orilla del embalse, en su mayoría por un sendero bien marcado, aunque es necesario superar algunas zonas rocosas que no son muy complicadas. Llegamos a la presa, donde podemos disfrutar del paisaje y observar las instalaciones abandonadas

Después de recorrer el embalse, regresamos por una pista forestal hasta llegar a un cortafuegos que debemos ascender cuesta arriba. Una vez superado, llegamos al punto de partida. Se recomienda una visita a la ciudad de Almadén, que posee un importante patrimonio histórico y minero.

Saliendo desde los parques de la plaza de toros, tras adquirir un pedazo de queso en la tienda de quesos ubicada en la calle de enfrente (aunque estaba cerrada, el dueño amablemente nos abrió), ascendimos hasta la cima de Cordoneras partiendo desde uno de los extremos de Almadén y regresando por el otro extremo.

La trayectoria es sencilla pero requiere buena condición física, ya que cuenta con pendientes muy engañosas que pueden dejar exhausto a más de una persona mayor.

Aquí cometí una imprudencia al llevar solamente 2 litros de agua y encontrarme con una temperatura de 40 grados. Me quedé sin agua un poco después de la mitad del camino justo en el momento de regresar. Afortunadamente, estaba atardeciendo, de lo contrario habría sufrido un golpe de calor. NO SUBESTIMES NI EL CALOR NI LAS PENDIENTES DE ALMADÉN. Es mejor evitar estas rutas en verano y si decides hacerlo, lleva al menos 1 litro de agua por cada 5 kilómetros y camina solo en las horas más frescas de la mañana y la noche.

Excursión de 15 kilómetros de longitud. Existe una amplia red de senderos cercanos que permiten variar tanto la distancia como la dificultad del recorrido.
Es un recorrido circular, aunque se ha fijado el punto de inicio en la Cárcel de Forzados y el de llegada en la Plaza de Toros, como puntos de interés destacables.
Las panorámicas de la Dehesa de Castilseras y su embalse desde el paraje de Puerto Revuelo son especialmente llamativas.

En nuestra visita a la Mancha nos detuvimos en Almadén. Nos llamó la atención la mina de mercurio, en particular.

Como disfrutamos de las excursiones, además de explorar la mina, decidimos investigar posibles rutas cercanas.

Desde el pueblo se observa claramente una larga y accidentada cresta rocosa sobre áreas de bosque mediterráneo. En lo alto destaca una cruz, conocida como «Cruz de los Mineros» según la información que encontramos en wikiloc.

Al seguir un primer track, nos topamos con una valla, común en Ciudad Real. Optamos por dar la vuelta para evitar problemas potenciales.

Recientemente descubrimos la posibilidad de cambiar de track durante una excursión, algo lógico pero desconocido para nosotros hasta ahora.

Decidimos seguir otro track que ascendía por una zona diferente. A pesar de que el sendero parecía mejor, en la parte alta se volvía difícil: terreno empinado, a veces cerrado, sin señales claras y con algunos tramos de escalada. Considerando las preferencias de mi pareja, decidimos regresar.

Parece que esta no es una ascensión convencional, a menos que haya una ruta diferente y desconocida.

Después de salir de la zona montañosa, elongamos la ruta con un pequeño recorrido por la dehesa, regresando a Almadén por la parte alta del pueblo.

Pintoresca travesía de senderismo circular que comienza en la localidad minera de Almadén (Ciudad Real) y atraviesa parte de su extenso territorio, incluyendo el Valle de Juan Gil y la Sierra de Cordoneros, desde la cual se puede disfrutar de una hermosa vista panorámica de la Dehesa de Castilseras y de las montañas que delimitan las provincias de Ciudad Real, Córdoba y Badajoz.

En esta ruta se puede apreciar una variada vegetación mediterránea, caracterizada por la presencia destacada de un alcornocal en la Sierra de Cordoneros, así como especies de repoblación. Además, es común encontrarse con rebaños de ganado a lo largo del camino, lo que puede requerir apartarse momentáneamente para permitir el paso de ovejas o vacas.

La travesía, mayormente llana y transitable, transcurre en su totalidad por caminos de fácil acceso. Se califica como moderada en términos de longitud, no por su dificultad técnica, la cual es mínima.

Forma parte del viaje por España desde Tarifa hasta Hondarribia, pasando por Santiago y la Punta Estaca de Bares.

Esta etapa corresponde al camino de los Mineros, también conocido como Camino a Guadalupe. Por lo general, este trayecto atraviesa Garlitos. Debido a la falta de alojamiento en el lugar, se recomienda dirigirse directamente a Siruela, donde se encuentra un hostal disponible. La señalización es escasa y puede resultar complicado encontrar el camino, sobre todo en la frontera entre Castilla y Extremadura, donde la vegetación cubre gran parte del sendero.

Para obtener más información sobre la travesía completa, se puede consultar en el siguiente enlace en francés.

Ruta de caminata que incluye la ascensión a la Cruz de los Mineros. Detalles completos de la expedición en el sitio web www.rutasdelmercurio.wordpress.com

El pasado fin de semana, nuestro grupo disfrutó de un viaje a Almadén el 1º de mayo de 2022, organizado por nuestros compañeros Vicen y Miguel Ángel. Ellos nos guiaron por esta tierra, donde pudimos visitar un lugar emblemático: Almadén, centro mundial de la minería del mercurio durante 2.000 años y declarado Patrimonio de la Humanidad hace una década.

Las rutas senderistas que realizamos en medio de un entorno natural esplendoroso hicieron que nuestra visita turística fuera aún más agradable. El día comenzó con un largo viaje en autobús desde Toledo hasta Almadén, que nos llevó más de 3 horas. Una vez allí, iniciamos nuestra caminata cerca del pozo de San Aquilino en lo que ahora es el Parque Minero, rodeando parte del complejo y descendiendo hacia el arroyo de la Fuente Vieja.

Después de cruzar el arroyo, ascendimos hasta llegar a la zona de La Venta, desde donde tomamos el camino que subía hasta la Virgen del Castillo. Desde esta ermita, ubicada a 730 m de altitud, se disfruta de unas vistas impresionantes de la región, cubierta de una vegetación exuberante y colorida típica de la primavera.

Tras descender por la ladera, continuamos por la Vereda de Badajoz y ascendimos por el Peñón de la Huerta Bayón hasta llegar al Valle de Juan Gil. Luego seguimos por la senda que ascendía por la ladera del Cerro de las Gradas hasta la cumbre, donde se encuentra la Cruz de los Mineros, disfrutando nuevamente de vistas panorámicas impresionantes.

Al regresar, seguimos remontando el valle por el arroyo y finalizamos la ruta en Almadén, donde Miguel Ángel y Vicen nos mostraron los lugares más interesantes del pueblo. Además, nos brindaron información detallada sobre la historia de la minería del mercurio, las condiciones laborales de los mineros, y visitamos lugares emblemáticos como el Parque Minero, el Real Hospital de Mineros de San Rafael y los restos de la antigua Cárcel de Forzados.